Gregorio
I. Su vida
Vivió entre 540-604 d.C.
Nació de buena familia en Roma.
Fue nombrado prefecto de Roma; luego, ingresó a un monasterio.
Contra sus propios deseos, fue hecho papa en el año 590.
Sus acciones como papa crearon un precedente importante para la iglesia de las edades medias.
II. Su contribución
Como papa, Gregorio se mezcló en asuntos civiles; durante su vida, las autoridades civiles eran muy débiles, y la iglesia se había hecho rica debido a los legados que había recibido de muchas personas de dinero. Gregorio usó estos fondos para defender el centro de Italia contra los invasores lombardos, para ayuda de los pobres y para otros fines. De esta forma, el papado empezó a reinar sobre el centro de Italia.
Esta combinación de poder político y autoridad espiritual definió la trayectoria de la iglesia católica durante las edades medias.
Su pensamiento teológico no fue original, salvo en la enseñanza del purgatorio; Gregorio elevó este concepto de una enseñanza a un dogma de la iglesia. Enseñó también que el sacrificio de la misa ayuda a las almas a pasar más rápidamente por el purgatorio.
Su exposición de Job ilustra la dirección alegórica que tomó la interpretación bíblica durante las edades medias. Gregorio dividió su exposición en tres segmentos: histórico, alegórico y moral. Su exposición histórica refleja poco conocimiento del trasfondo del medio oriente; su exposición alegórica pasa de ser creíble (véanse "sus palabras"
para un ejemplo).
Aunque fue una persona devota, sincera y educada, Gregorio dio inicio a muchas de las innovaciones que guiaron a la iglesia de las edades medias en una dirección equivocada.
III. Sus palabras
Job representa a Cristo; su esposa, la naturaleza carnal; sus siete hijos (siete siendo el número de la perfección) representan a los apóstoles, y por ende, al clérigo; sus tres hijas las tres clases de laicos fieles que adoran a la Trinidad; sus amigos, los herejes; las siete mil ovejas, los creyentes perfectos; los tres mil camellos, los paganos y samaritanos; las quinientas yuntas de bueyes y quinientas asnas nuevamente los paganos, porque el profeta Isaías dice: El buey conoce a su dueño, y el asno la cuna de su dueño; pero Israel no conoce, mi pueblo no considera.
(Este es un buen ejemplo de la alegorización descontrolada.)
No hay adversidad que pueda derribar a aquel que la prosperidad no ha logrado engañar.
El universo no contiene bastantes riquezas para comprar el voto de un hombre honrado.
Ayudar al débil es caridad; pretender ayudar al poderoso es orgullo.
I. Su vida
Vivió entre 540-604 d.C.
Nació de buena familia en Roma.
Fue nombrado prefecto de Roma; luego, ingresó a un monasterio.
Contra sus propios deseos, fue hecho papa en el año 590.
Sus acciones como papa crearon un precedente importante para la iglesia de las edades medias.
II. Su contribución
Como papa, Gregorio se mezcló en asuntos civiles; durante su vida, las autoridades civiles eran muy débiles, y la iglesia se había hecho rica debido a los legados que había recibido de muchas personas de dinero. Gregorio usó estos fondos para defender el centro de Italia contra los invasores lombardos, para ayuda de los pobres y para otros fines. De esta forma, el papado empezó a reinar sobre el centro de Italia.
Esta combinación de poder político y autoridad espiritual definió la trayectoria de la iglesia católica durante las edades medias.
Su pensamiento teológico no fue original, salvo en la enseñanza del purgatorio; Gregorio elevó este concepto de una enseñanza a un dogma de la iglesia. Enseñó también que el sacrificio de la misa ayuda a las almas a pasar más rápidamente por el purgatorio.
Su exposición de Job ilustra la dirección alegórica que tomó la interpretación bíblica durante las edades medias. Gregorio dividió su exposición en tres segmentos: histórico, alegórico y moral. Su exposición histórica refleja poco conocimiento del trasfondo del medio oriente; su exposición alegórica pasa de ser creíble (véanse "sus palabras"
para un ejemplo).
Aunque fue una persona devota, sincera y educada, Gregorio dio inicio a muchas de las innovaciones que guiaron a la iglesia de las edades medias en una dirección equivocada.
III. Sus palabras
Job representa a Cristo; su esposa, la naturaleza carnal; sus siete hijos (siete siendo el número de la perfección) representan a los apóstoles, y por ende, al clérigo; sus tres hijas las tres clases de laicos fieles que adoran a la Trinidad; sus amigos, los herejes; las siete mil ovejas, los creyentes perfectos; los tres mil camellos, los paganos y samaritanos; las quinientas yuntas de bueyes y quinientas asnas nuevamente los paganos, porque el profeta Isaías dice: El buey conoce a su dueño, y el asno la cuna de su dueño; pero Israel no conoce, mi pueblo no considera.
(Este es un buen ejemplo de la alegorización descontrolada.)
No hay adversidad que pueda derribar a aquel que la prosperidad no ha logrado engañar.
El universo no contiene bastantes riquezas para comprar el voto de un hombre honrado.
Ayudar al débil es caridad; pretender ayudar al poderoso es orgullo.