¿Quién es la roca?
L.M. nos envía la siguiente pregunta: ¿Qué significado tienen o qué enseñan esas palabras que Jesús le dijo a Pedro: Sobre esta roca edificaré mi iglesia?
Respuesta:
El pasaje citado en la pregunta ha dado lugar a varias interpretaciones; históricamente, ha servido como punto de partida para el concepto del papado en la iglesia católica. ¿Cuál es el significado verdadero del pasaje? Para empezar, citémoslo:
Viniendo Jesus a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas. El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo. (Mateo 16:13-20 RV)
Las multitudes tenían opiniones variadas acerca de la identidad de Jesús, pero él deseaba saber quién le creían ser sus discípulos, estos hombres en quienes había invertido tanto tiempo y tanto esfuerzo. Frente a la pregunta, Pedro responde con una declaración de fe: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Este es un momento crucial en el evangelio de Mateo. Desde luego, los discípulos habían sospechado - por lo menos - que Jesús era el Mesías, o Cristo (estas palabras son sinónimos), pero aquí Pedro lo declara.
Jesús hace entonces la declaración que da lugar a la pregunta. Jesús le dice: Tú eres Pedro, nombre que significa "piedra"; y luego hace un juego de palabras: le dice, Sobre esta roca edificaré mi iglesia. ¿Cuál es la roca? La interpretación católica entiende que es Pedro; pero Jesús no usa su nombre al decir, Sobre esta roca edificaré mi iglesia. El nombre "Pedro" y la palabra "roca" son diferentes, tanto en español como en griego. Es mejor entender que la roca sobre la cual Jesus edifica su iglesia es la declaración de fe que Pedro acaba de hacer. Sobre esta roca - sobre esta declaración de fe - edificaré mi iglesia. En otras palabras, toda persona que llegue a compartir la misma fe de la que Pedro acababa de dar testimonio formaría parte de la iglesia. Por medio de esa declaración de fe, la iglesia sería edificada.
Entendido de esta forma, podemos comprender también la frase siguiente. Cuando Jesus le dice a Pedro: Te daré las llaves del cielo, no le está dando alguna autoridad especial sacerdotal. Cuando lleguemos al cielo, no veremos al apóstol Pedro allí frente a la puerta, como las caricaturas lo pintan. Más bien, por medio de la proclamación del evangelio - del mensaje resumido en la declaración de fe que Pedro acaba de hacer - los apóstoles (representados por Pedro, el que dio el primer sermón evangelístico en el Día de Pentecostés) abrirían las puertas del cielo a quienes aceptaran el mensaje, y se las cerrarían a quienes lo rechazaran. Los doce discípulos, esta pequeña banda en medio de una humanidad inmensa, llegarían a ser los porteros del cielo por medio de su proclamación del mensaje. Toda la iglesia ha heredado su tarea; cuando predicamos el evangelio, también abrimos y cerramos la puerta de la vida. La abrimos a quienes aceptan el mensaje, y la cerramos a quienes lo rechazan. Tenemos una gran responsabilidad, y un gran privilegio.
Pastor Tony Hancock
L.M. nos envía la siguiente pregunta: ¿Qué significado tienen o qué enseñan esas palabras que Jesús le dijo a Pedro: Sobre esta roca edificaré mi iglesia?
Respuesta:
El pasaje citado en la pregunta ha dado lugar a varias interpretaciones; históricamente, ha servido como punto de partida para el concepto del papado en la iglesia católica. ¿Cuál es el significado verdadero del pasaje? Para empezar, citémoslo:
Viniendo Jesus a la región de Cesarea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas. El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo. (Mateo 16:13-20 RV)
Las multitudes tenían opiniones variadas acerca de la identidad de Jesús, pero él deseaba saber quién le creían ser sus discípulos, estos hombres en quienes había invertido tanto tiempo y tanto esfuerzo. Frente a la pregunta, Pedro responde con una declaración de fe: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente. Este es un momento crucial en el evangelio de Mateo. Desde luego, los discípulos habían sospechado - por lo menos - que Jesús era el Mesías, o Cristo (estas palabras son sinónimos), pero aquí Pedro lo declara.
Jesús hace entonces la declaración que da lugar a la pregunta. Jesús le dice: Tú eres Pedro, nombre que significa "piedra"; y luego hace un juego de palabras: le dice, Sobre esta roca edificaré mi iglesia. ¿Cuál es la roca? La interpretación católica entiende que es Pedro; pero Jesús no usa su nombre al decir, Sobre esta roca edificaré mi iglesia. El nombre "Pedro" y la palabra "roca" son diferentes, tanto en español como en griego. Es mejor entender que la roca sobre la cual Jesus edifica su iglesia es la declaración de fe que Pedro acaba de hacer. Sobre esta roca - sobre esta declaración de fe - edificaré mi iglesia. En otras palabras, toda persona que llegue a compartir la misma fe de la que Pedro acababa de dar testimonio formaría parte de la iglesia. Por medio de esa declaración de fe, la iglesia sería edificada.
Entendido de esta forma, podemos comprender también la frase siguiente. Cuando Jesus le dice a Pedro: Te daré las llaves del cielo, no le está dando alguna autoridad especial sacerdotal. Cuando lleguemos al cielo, no veremos al apóstol Pedro allí frente a la puerta, como las caricaturas lo pintan. Más bien, por medio de la proclamación del evangelio - del mensaje resumido en la declaración de fe que Pedro acaba de hacer - los apóstoles (representados por Pedro, el que dio el primer sermón evangelístico en el Día de Pentecostés) abrirían las puertas del cielo a quienes aceptaran el mensaje, y se las cerrarían a quienes lo rechazaran. Los doce discípulos, esta pequeña banda en medio de una humanidad inmensa, llegarían a ser los porteros del cielo por medio de su proclamación del mensaje. Toda la iglesia ha heredado su tarea; cuando predicamos el evangelio, también abrimos y cerramos la puerta de la vida. La abrimos a quienes aceptan el mensaje, y la cerramos a quienes lo rechazan. Tenemos una gran responsabilidad, y un gran privilegio.
Pastor Tony Hancock