¿Cómo se escribieron los salmos?
W.C. nos envía la siguiente pregunta: Indique en qué circunstancias se escribieron los salmos 3, 18, 24, 51, y 120, 121,
122.
Respuesta:
No todos los salmos nos explican las circunstancias que llevaron a su composición. A fin de cuentas, Dios ha inspirado los salmos para que su pueblo los use, cualesquiera que sean sus circunstancias, para canalizar sus sentimientos y experiencias hacia él. Encontramos salmos para muchas situaciones diferentes de la vida.
En los casos en que tenemos información acerca de las circunstancias del autor del salmo, esta información nos ayuda a interpretar correctamente el salmo. Esta información aparece en el encabezado del salmo, debajo del número. En la versión hebrea del Antiguo Testamento esta información es numerada como si fuera el primer verso del salmo.
Según la información que nos proporciona el subtítulo del Salmo 3, este salmo fue escrito cuando David huía de su hijo Absalón. Este había tramado un plan para quitar a su padre del trono e instalarse allí a sí mismo. Podemos leer acerca de este evento en 2 Samuel 15. Hay más información acerca de las fallas de David como padre aquí.
El Salmo 18, segun el subtítulo, fue escrito después de que David fue liberado de mano de sus enemigos y de Saúl. Este Salmo es casi idéntico a 2 Samuel 22. Por este motivo, es muy probable que haya sido escrito por David hacia el final de su vida.
El Salmo 24 es, según el subtítulo, uno de los salmos de David, pero no sabemos más acerca de las circunstancias de su escritura. Es posible que haya sido escrito para celebrar el traslado del arca del pacto a Jerusalén de la casa de Obed-Edom (2 Samuel 6).
El Salmo 51 fue escrito por David para expresar su arrepentimiento tras ser confrontado por el profeta Natán. David había cometido adulterio con Betsabé y luego arreglado la muerte de su esposo para encubrir su pecado. La historia de este triste episodio se encuentra en 2 Samuel 11 y 12. Este salmo sirve como un gran ejemplo del verdadero arrepentimiento, pues el rey demuestra su tristeza por haberle fallado a Dios.
Los Salmos 120, 121 y 122 son cánticos de los peregrinos, según el subtítulo. Los israelitas que peregrinaban al templo de Jerusalén para celebrar las fiestas anuales cantaban estos cantos en el camino. Cada salmo representa un paso en el camino. Por ejemplo, en el Salmo 120, el peregrino empieza su viaje en una tierra lejana. En el Salmo 121, el peregrino busca la ayuda del Señor en el camino. En el Salmo 122, el salmista llega a Jerusalén y celebra su belleza. El único de estos tres salmos escrito por David es el último. No conocemos las circunstancias de la escritura original de los salmos, pero el pueblo de Dios vio que eran apropiados para usarse como parte del peregrinaje, y así los usó.
Los salmos son uno de los legados preciosos que tenemos en la Biblia. Hagamos uso de ellos con regularidad, tanto en nuestra adoración individual como en nuestra adoración unida.
Pastor Tony Hancock
W.C. nos envía la siguiente pregunta: Indique en qué circunstancias se escribieron los salmos 3, 18, 24, 51, y 120, 121,
122.
Respuesta:
No todos los salmos nos explican las circunstancias que llevaron a su composición. A fin de cuentas, Dios ha inspirado los salmos para que su pueblo los use, cualesquiera que sean sus circunstancias, para canalizar sus sentimientos y experiencias hacia él. Encontramos salmos para muchas situaciones diferentes de la vida.
En los casos en que tenemos información acerca de las circunstancias del autor del salmo, esta información nos ayuda a interpretar correctamente el salmo. Esta información aparece en el encabezado del salmo, debajo del número. En la versión hebrea del Antiguo Testamento esta información es numerada como si fuera el primer verso del salmo.
Según la información que nos proporciona el subtítulo del Salmo 3, este salmo fue escrito cuando David huía de su hijo Absalón. Este había tramado un plan para quitar a su padre del trono e instalarse allí a sí mismo. Podemos leer acerca de este evento en 2 Samuel 15. Hay más información acerca de las fallas de David como padre aquí.
El Salmo 18, segun el subtítulo, fue escrito después de que David fue liberado de mano de sus enemigos y de Saúl. Este Salmo es casi idéntico a 2 Samuel 22. Por este motivo, es muy probable que haya sido escrito por David hacia el final de su vida.
El Salmo 24 es, según el subtítulo, uno de los salmos de David, pero no sabemos más acerca de las circunstancias de su escritura. Es posible que haya sido escrito para celebrar el traslado del arca del pacto a Jerusalén de la casa de Obed-Edom (2 Samuel 6).
El Salmo 51 fue escrito por David para expresar su arrepentimiento tras ser confrontado por el profeta Natán. David había cometido adulterio con Betsabé y luego arreglado la muerte de su esposo para encubrir su pecado. La historia de este triste episodio se encuentra en 2 Samuel 11 y 12. Este salmo sirve como un gran ejemplo del verdadero arrepentimiento, pues el rey demuestra su tristeza por haberle fallado a Dios.
Los Salmos 120, 121 y 122 son cánticos de los peregrinos, según el subtítulo. Los israelitas que peregrinaban al templo de Jerusalén para celebrar las fiestas anuales cantaban estos cantos en el camino. Cada salmo representa un paso en el camino. Por ejemplo, en el Salmo 120, el peregrino empieza su viaje en una tierra lejana. En el Salmo 121, el peregrino busca la ayuda del Señor en el camino. En el Salmo 122, el salmista llega a Jerusalén y celebra su belleza. El único de estos tres salmos escrito por David es el último. No conocemos las circunstancias de la escritura original de los salmos, pero el pueblo de Dios vio que eran apropiados para usarse como parte del peregrinaje, y así los usó.
Los salmos son uno de los legados preciosos que tenemos en la Biblia. Hagamos uso de ellos con regularidad, tanto en nuestra adoración individual como en nuestra adoración unida.
Pastor Tony Hancock