¿Fríos o calientes?
Desde México nos escribe J.L: ¿Me pudiera sacar de dudas respecto a lo que dice en Apocalipsis: "que Dios nos quiere o muy fríos o muy calientes"?
Respuesta:
Esta pregunta nos lleva al valor de conocer un poco del trasfondo de los pasajes bíblicos que estudiamos, pues el trasfondo histórico y cultural ilumina el sentido del pasaje. Por lo general, el trasfondo no cambia el significado aparente del pasaje; solo nos ayuda a entenderlo mejor.
Nuestro hermano habla de Apocalipsis 3:15, que dice lo siguiente: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente!
Este verso es parte del mensaje de Jesús a la iglesia de Laodicea, una de las siete iglesias a las que escribe en la primera sección de Apocalipsis. Estos mensajes se pueden aplicar a las iglesias a través de la historia de la iglesia que viven circunstancias espirituales similares.
La ciudad de Laodicea recibía su agua de una fuente hidrotérmica. El agua estaba caliente al salir de la tierra, pero en el recorrido a Laodicea, se enfriaba, y llegaba a la ciudad tibia y desagradable. Jesus aquí compara a la iglesia con esa agua y declara que ellos no le servían para nada. "Ni frío ni caliente" significa que no eran como una agua fría, refrescante para tomar, ni caliente, agradable para bañarse, sino agua tibia inservible. Por este motivo, como no le eran útiles para nada, estaba a punto de escupirlos de su boca. Esto representa su rechazo de la iglesia como tal para su uso, aunque individuos dentro de la iglesia podrían ser salvos (ver 3:20).
Aquí, como en otros pasajes, Dios repite su deseo de tener un pueblo que produzca fruto para él. La iglesia no debe convertirse en un club que existe para deleite de sus miembros, sino un ejército que pelea para su Capitán. Si olvidamos esto, podemos caer en la misma trampa en la que cayó la iglesia de Laodicea.
Pastor Tony Hancock
Desde México nos escribe J.L: ¿Me pudiera sacar de dudas respecto a lo que dice en Apocalipsis: "que Dios nos quiere o muy fríos o muy calientes"?
Respuesta:
Esta pregunta nos lleva al valor de conocer un poco del trasfondo de los pasajes bíblicos que estudiamos, pues el trasfondo histórico y cultural ilumina el sentido del pasaje. Por lo general, el trasfondo no cambia el significado aparente del pasaje; solo nos ayuda a entenderlo mejor.
Nuestro hermano habla de Apocalipsis 3:15, que dice lo siguiente: Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente!
Este verso es parte del mensaje de Jesús a la iglesia de Laodicea, una de las siete iglesias a las que escribe en la primera sección de Apocalipsis. Estos mensajes se pueden aplicar a las iglesias a través de la historia de la iglesia que viven circunstancias espirituales similares.
La ciudad de Laodicea recibía su agua de una fuente hidrotérmica. El agua estaba caliente al salir de la tierra, pero en el recorrido a Laodicea, se enfriaba, y llegaba a la ciudad tibia y desagradable. Jesus aquí compara a la iglesia con esa agua y declara que ellos no le servían para nada. "Ni frío ni caliente" significa que no eran como una agua fría, refrescante para tomar, ni caliente, agradable para bañarse, sino agua tibia inservible. Por este motivo, como no le eran útiles para nada, estaba a punto de escupirlos de su boca. Esto representa su rechazo de la iglesia como tal para su uso, aunque individuos dentro de la iglesia podrían ser salvos (ver 3:20).
Aquí, como en otros pasajes, Dios repite su deseo de tener un pueblo que produzca fruto para él. La iglesia no debe convertirse en un club que existe para deleite de sus miembros, sino un ejército que pelea para su Capitán. Si olvidamos esto, podemos caer en la misma trampa en la que cayó la iglesia de Laodicea.
Pastor Tony Hancock