· Un niño pequeño tenía algo muy importante que decirles a sus padres. Ya decidí lo que quiero hacer cuando sea grande, les anunció. Quiero ser pastor. Sus padres se sintieron contentos, pero su madre quería saber más. ¿Por qué quieres ser pastor, hijo? – preguntó.
· El niño contestó: Bueno, ya sé que tengo que ir a la iglesia, y creo que sería mucho más divertido pararme a gritar en lugar de sentarme a escuchar. ¡Las ocurrencias de los niños! Pero creo que ese niño estaba un poco confundido. En realidad, no sabía qué hacía en la iglesia. · Como ese niño, muchos están confundidos acerca de su papel en la iglesia. Quizás alguna vez se pregunten: ¿Qué hago aquí? No saben realmente cómo funciona la iglesia. Quizás piensen que lo único que hace el pastor es pararse a gritar, y lo único que hacen los miembros es sentarse a escuchar. Sin embargo, el plan de Dios para su iglesia es mucho más interesante que eso. · Vamos hoy a recorrer algunos pasajes bíblicos que nos hablan de la iglesia. Este es un mensaje práctico, y espero contestar algunas de tus preguntas acerca de la iglesia. Sobre todo, espero que todos seamos inspirados a participar más plenamente en la iglesia, la familia de Dios. · Comenzamos con esta pregunta: ¿Cómo entro a la iglesia? Para esto, vamos a consultar Hechos 2:41. Dice así: Así, pues, los que recibieron su mensaje fueron bautizados, y aquel día se unieron a la iglesia unas tres mil personas. (NVI) · Este versículo describe lo que sucedió el día que comenzó la iglesia. El día de Pentecostés, el Espíritu Santo descendió para llenar a los discípulos que Jesús había dejado cuando él regresó al cielo. Como resultado, comenzaron a hablar en lenguas y a proclamar la Palabra de Dios. · Pedro dio un mensaje ese día acerca de Jesús, y mucha gente creyó lo que él decía. Tres mil personas se unieron a la iglesia. ¿Cómo lo hicieron? ¿Cómo llegaron a ser parte de la iglesia? Primero, recibieron el mensaje. Creyeron el evangelio. Pusieron su confianza en Jesús. Segundo, fueron bautizados. Declararon su fe públicamente en las aguas del bautismo. · Este plan no ha cambiado. A lo largo del Nuevo Testamento vemos lo mismo: las personas reciben el mensaje de salvación, se bautizan y así llegan a ser parte de la iglesia. La manera principal de llegar a ser miembro de la iglesia es reconocer a Jesucristo como Señor y Salvador y bautizarte allí. · Si te mudas a otro lugar, debes buscar una iglesia donde se predique la Palabra de Dios y unirte también a esa iglesia. No es necesario que te vuelvas a bautizar; simplemente pides el traspaso de tu membresía a la iglesia donde te vas a congregar. Así podrás participar plenamente en la vida de tu nueva congregación. · Una vez supe de una familia que recibía frecuentemente a uno de los niños de su vecindad. Se había hecho amigo de uno de los hijos de la familia, y su propia familia casi nunca cenaban juntos. Él se acostumbró a ir a cenar en casa de su amigo. Allí lo querían mucho, y era como parte de la familia. Sin embargo, no era parte oficial de la familia. Había amor, pero no existía el mismo compromiso. · En cada iglesia hay personas que asisten por mucho tiempo, pero no se unen oficialmente a la iglesia. Se parecen a ese niño. Son queridos y aceptados, pero no tienen el mismo compromiso. Les hace falta unirse oficialmente a la iglesia. Nunca serán rechazados, pero les falta algo más. Si estás en esa situación, ¿por qué no te haces miembro de la iglesia? Toma ese paso. · Ya hemos contestado una pregunta: ¿Cómo entro a la iglesia? Entras a la iglesia cuando reconoces a Jesucristo como Señor y Salvador, y te bautizas como la Biblia manda. También puedes pasar tu membresía a otra iglesia, si te mudas a otro lugar, por ejemplo. · Ahora pasamos a otra pregunta. Quiero que te imagines, por un momento, que aterrizara un ovni afuera de la iglesia. Después de unos momentos, se abre la puerta de la nave espacial y unos enanitos verdes se bajan. Uno se te acerca, y como siempre sucede en las películas, te dice: Llévame a tu líder. ¿A quién se lo llevas? ¿Quién está a cargo de la iglesia? · Vamos a encontrar la respuesta en Filipenses 1:1. Aquí leemos: Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos en Cristo Jesús que están en Filipos, junto con los obispos y diáconos. (NVI) · El verdadero líder de la iglesia es Cristo Jesús. Es él quien manda. Muchas iglesias han olvidado esto, y muchos pastores también lo han olvidado. Muchos creyentes buscan que se haga en la iglesia lo que ellos quieren, en lugar de preguntar lo que Jesús quiere. Muchos pastores también se portan como si la iglesia existiera para su conveniencia. · La iglesia es de Cristo. Él coloca en la iglesia a dos clases de líderes, que Pablo aquí menciona. Los primeros son los obispos. Esa palabra simplemente significa supervisor. De otros pasajes sabemos que obispo, pastor y anciano se refieren al mismo oficio dentro de la iglesia. Hoy en día es más común llamarles pastores. Su labor es enseñar y dirigir la iglesia. · El otro tipo de líder son los diáconos. Esa palabra significa siervo. La responsabilidad de los diáconos es servir dentro de la iglesia. Por ejemplo, en nuestra iglesia, cada diácono es responsable de cuidar espiritualmente a ciertos miembros. En otras iglesias, se maneja por familias. Lo importante es que la responsabilidad de los diáconos es servir las necesidades de la congregación. · Bajo la autoridad de Jesús, entonces, tenemos estos dos tipos de líderes. Los pastores o ancianos dan dirección espiritual, y los diáconos sirven. Hebreos 13:17 nos dice que la iglesia prospera cuando se respeta el liderazgo. Dice así: Obedezcan a sus dirigentes y sométanse a ellos, pues cuidan de ustedes como quienes tienen que rendir cuentas. Obedézcanlos a fin de que ellos cumplan su tarea con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho. (NVI) · La iglesia simplemente funciona mejor cuando hay apoyo para los líderes. En cambio, cuando hay críticas y quejas sobre cosas insignificantes, esto cansa a los líderes y les quita la alegría de servir. Se cuenta la historia de un pastor anglo que se mudó de la parte norte del país para tomar una iglesia en Texas. No conocía muy bien la cultura, pero estaba preparado para servir al Señor. · Decidió reunirse con los diáconos de la iglesia para hacer puénting, es decir, saltar con cuerdas elásticas de un puente. Le pareció que así se podían conocer mejor. Un sábado por la mañana se reunieron en el puente, y el nuevo pastor se ofreció para ser el primero en saltar. A la orilla del río que corría debajo del puente había una familia mexicana que celebraba un cumpleaños. El pastor dijo: Yo sé cómo ajustar bien las cuerdas para no caer sobre la familia. Todo estará bien. · Dicho esto, se amarró las cuerdas elásticas, se paró por un segundo sobre el barandal del puente y se lanzó al espacio. Los diáconos lo vieron flotar hacia abajo. Llegó al extremo de las cuerdas y quedó suspendido encima de la familia mexicana. De repente, vieron que se levantó una gran nube de polvo alrededor del pastor y se oían gritos y golpes. · Muy pronto, la cuerda elástica lo hizo brincar hacia arriba, y se dieron cuenta de que estaba un poco golpeado. Trataron de alcanzarlo, pero nuevamente se cayó. Otra vez vieron levantarse la nube de polvo y oyeron los gritos y golpes. Cuando la cuerda lo volvió a levantar hacia ellos, lo agarraron con toda su fuerza y lo pararon sobre el puente. Vieron que estaba muy lastimado. · Después de recuperar el aliento, el pastor les preguntó: ¿Qué es una piñata? ¡Pobre hombre! Cuando el pastor se convierte en la piñata de la iglesia, todos sufren. Cuando enfrenta quejas y problemas y falta de responsabilidad, no puede hacer su tarea con alegría. Sospecho que, en el día del juicio, Dios tendrá cosas que decirles a los que les hacen la vida imposible a los pastores. · Pero Jesús no sólo guía a su iglesia por medio de los pastores y otros líderes. Él también ha puesto su Espíritu en cada miembro de la iglesia. Por medio del Espíritu Santo, él dirige a todos. Podemos ver un ejemplo de esto en una historia que ustedes verán esta semana en la célula familiar, así que sólo la mencionaré de paso. · Cuando se presentó en la iglesia el problema de las viudas, los apóstoles le dijeron a la congregación: Elijan de entre ustedes a hombres llenos del Espíritu. En otras palabras, los apóstoles no dijeron: Nosotros somos los únicos que sabemos. Vamos a señalar a los que van a servir. Más bien, su actitud fue: Ustedes también tienen al Espíritu. Escojan personas que puedan servir. · Esto produce algo muy interesante. Por una parte, la iglesia tiene pastores que se deben respetar y seguir. Por otra parte, toda la congregación es capaz de tomar ciertas decisiones, y es responsable por hacerlo. No es una incoherencia, pero sí es una situación inusual. · Sin embargo, cuando esto se vive, la iglesia prospera. La iglesia se estanca cuando hay tiranía, cuando el pastor es el dictador. La iglesia también se estanca cuando hay anarquía, cuando todo el mundo hace lo que quiere. Pero la iglesia prospera cuando el pastor da liderazgo y es respetado, pero la congregación también se hace responsable de tomar las decisiones que le corresponden. · Para que esto suceda, se necesita madurez. Una de las mejores cosas que puedes hacer para que tu iglesia sea sana es crecer tú mismo como creyente. Conforme más tiempo pasemos en oración, en el estudio de la Palabra y en comunión juntos, mejor iglesia seremos. · Quiero terminar este mensaje haciendo dos llamados. En primer lugar, si no eres parte de la iglesia, ¿por qué no te unes hoy? Si quieres pasar tu membresía de otra iglesia, ven al frente para expresar tu deseo. Si no te has bautizado bíblicamente, toma esa decisión hoy y comprométete con Jesucristo. · En segundo lugar, si ya eres parte de la iglesia, busca la manera de apoyar. ¿Te acuerdas del niño que mencioné al principio? Pertenecer a la iglesia no es simplemente pararte a gritar, o sentarte a escuchar. Puedes ser un apoyo, una parte importante e íntegra del avance de la iglesia. Bajo la dirección de Cristo, podemos lograr el propósito para el cual él nos ha puesto aquí.
0 Comentarios
Tu comentario se publicará después de su aprobación.
Deja una respuesta. |
Archivos
Septiembre 2024
|